Estafan a adultos con cuentas bancarias

México.- Aunque creas en la buena voluntad, si tienes problemas con tu tarjeta en el cajero automático de tu banco, no aceptes ayuda de extraños, sobre todo si eres adulto mayor, pues podría tratarse de delincuentes que aprovecharán para hacerte un “tallado” de tarjeta.

Desde hace varios meses, tanto la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) como la Asociación de Bancos de México (ABM) alertaron a la población sobre este ilícito que toma como víctimas a quienes buscan sacar dinero de su tarjeta de débito.

Ello, con especial énfasis a los adultos mayores, pues además de ser quienes prefieren el uso del efectivo sobre el dinero digital, tienden a requerir ayuda para usar los cajeros automáticos, pues en ocasiones sus pantallas son difíciles de leer, quedando en manos de quien esté a su alrededor, pues el personal bancario sólo atiende cuando la sucursal está abierta.

Aunque seguramente ya sabes, pues se han hecho virales varios casos a través de las redes sociales, el tallado de tarjeta es el método de estafa para robar tu tarjeta de débito, y dinero, en el que delincuentes te quitan el plástico y después obtienen tu NIP (Número de Identificación Personal).

Esto, lo hacen alterando la ranura del cajero donde se inserta la tarjeta para que no pueda leerla, por lo que uno de ellos se ofrece a ayudarte, asegurando que sólo hay que limpiar, o “tallar” el plástico para que funcione, aprovechando para cambiar tu tarjeta por otra sin que te des cuenta.

Una variante, según la ABM, es que sin meter el plástico antes, el primero te dice que hay fallas con el cajero y que hay que tallarlo para que pueda leerla.

Al salir el primero de la sucursal, entra su cómplice, quien aprovecha cuando metes tu NIP para verlo, para usarlo más tarde con tu plástico, que se llevó la primera persona, y sacarte el dinero. Mientras, tu seguirás con problemas para acceder, siendo regularmente muy tarde cuando notes que ésa no es tu tarjeta.

Y es que incluso, se han dado casos en que al enfrentar al delincuente que se llevó tu plástico, muestran otra diferente, evitando así ser detenidos por policías. De hecho, por este tipo de situaciones, además de que ya es tarde cuando la víctima nota el cambio, no hay cifras oficiales sobre la frecuencia de esta estafa.