La Caldera

Editorial Radiza Chihuahua

* EL DEBATE Y SUS GANADORES

HACE MUCHOS años, los medios de comunicación impresos realizaban sondeos telefónicos para conocer la percepción de la población en torno a los debates.

La primera pregunta era: ¿vio el debate?, seguida, en caso afirmativo, de quién ganó o quién perdió. Así de simple y sencillo se configuraba, por lo menos, una idea de quién fue el ganador. De la credibilidad y profesionalismo del medio dependía la incidencia en la opinión pública.

Ahora, a priori, fuera de la opinión y percepción personal, es difícil tener mediciones reales pese a los avances en las tecnologías de información y comunicación. Las encuestadoras son empresas; evidentemente, cobran por sus trabajos y resultados.

Unos minutos después de que concluyó el debate del domingo, algunos medios de comunicación y varias casas encuestadoras publicaron a la ganadora. La mayoría dijo que fue Claudia Sheinbaum y otras que fue Xóchitl Gálvez. Ni una sola colocó al palero Jorge Álvarez como el ganador.

Propuestas pocas; ataques cruzados varios, entre las candidatas y en medio Álvarez, que se pudo haber despachado con la cuchara grande, nada tenía que perder, pero prefirió mostrar su sonrisa Colgate a Sheinbaum y al público.

Claudia muy amarrada o acorralada, sin confianza y molesta; Xóchitl nerviosa, pero más suelta. La candidata opositora debió ser más incisiva en sus cuestionamientos sobre todo de corrupción, opacidad del régimen y el fracaso en salud.

Claudia requiere mostrar frescura, debió responder las preguntas espinosas y dejar de lado el yo, yo, yo hice…; establecer la continuidad de lo exitoso, no así de lo que ha resultado caótico en el régimen 4T.

Entonces, ¿Quién ganó el debate? En realidad, nadie, bajo la premisa de que México debió haber sido el ganador, pero no.

¿A quién beneficio el debate? Definitivamente, a Xóchitl y a Álvarez, que ahora, por lo menos, saben quiénes son, es decir, ya hay conocimiento de ambos y eso se va a reflejar en las encuestas serias en unos días.

* ⁠CUSTODIOS PIDEN LO JUSTO

A RAÍZ del asesinato del comandante de custodios, José Guadalupe, este grupo que lideraba se manifestó y estuvo a punto de ir a un paro laboral, no solo por el tema de garantías de seguridad, sino también por condiciones de trabajo y remuneraciones económicas.

Se supone que el listón de peticiones ya está bajo revisión, pero también han transcurrido varias semanas y nada. En total, hay 592 custodios, hombres y mujeres, en los penales estatales a cargo de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado.

Existen celadores a quienes se les adeuda el pago retroactivo desde hace ocho meses; siguen sin basificación, pero por lo pronto ya se les entregó uniforme nuevo y dicen que serán dotados de chalecos y armas.

Esperemos que así sea y no sean promesas, ahora que estamos en plenas campañas políticas.

* ⁠CANDIDATOS CON SEGURIDAD ESTATAL Y MUNICIPAL

MÁS o menos, bajo el acuerdo protocolario de seguridad para los candidatos a senadurías y diputaciones federales, la protección en materia de seguridad correrá a cargo del Gobierno del Estado.

Para las candidaturas locales que requieran personal de seguridad, serán los municipios quienes la operen a través de sus policías, salvo que no tengan capacidad o que en los candidatos no exista la confianza necesaria.

Los detalles del Protocolo de Seguridad Chihuahua permanecen bajo reserva por obvias razones; hasta ahora, en el tema de los candidatos a posiciones federales, no hay solicitud en ese sentido de ninguna de las alianzas partidarias que van de manera individual.

El protocolo presentado recientemente por el Gobierno del Estado a las dirigencias estatales, municipales y al Instituto Estatal Electoral llega luego de que el Gobierno Federal se lavara las manos en materia de seguridad para los candidatos y mandara a los estados la responsabilidad que les corresponde.