Estado de México.- Tras permanecer apenas seis meses en su casa de Xilotzingo, esta tarde el exgobernador de Puebla, Mario Marín, fue trasladado de vuelta al penal del Altiplano en el Estado de México, luego de que fue revocada la medida cautelar de prisión domiciliaria que tenía.
Fuentes confirmaron que el regreso del Gober precioso a Almoloya se debió a que la periodista Lydia Cacho se inconformó por la prisión domiciliaria del exmandatario.
El Tribunal Colegiado de Apelación del Vigésimo Séptimo Circuito, con sede en Cancún, Quintana Roo, fue el que revocó la medida cautelar otorgada por una jueza penal.
Por ello, tras la apelación, Marín fue notificado la tarde de hoy que regresaría al Centro Federal de Readaptación Social Número 1 Almoloya.
En este sentido, el exmandatario reingresó al penal a las 21:48 horas de este miércoles.
La Fiscalía General de la República (FGR) indicó que la decisión del Tribunal de Alzada establece que la resolución dictada en beneficio del imputado careció de fundamentación adecuada, no valoró los riesgos procesales y omitió considerar el riesgo de fuga y la gravedad de los hechos imputados.
“Por su parte, el Ministerio Público Federal enfatiza la trascendencia nacional del presente asunto, no sólo por la naturaleza del delito de tortura, sino por tratarse de una agresión contra una periodista en ejercicio de su libertad de expresión, en un contexto de uso ilegítimo de las instituciones del Estado para reprimir el derecho a la información”, apuntó la FGR.
"Hemos ganado", dice Lydia Cacho luego del traslado de Marín
A través de un video, la periodista Lydia Cacho celebró la determinación judicial de regresar al exgobernador al penal de máxima seguridad.
Anteriormente, Cacho denunció al exgobernador por tortura, consiguiendo así su aprehensión y encarcelamiento, mismo que desde hace seis meses vivía en su domicilio particular.
Lo expuesto por la periodista refiere que fue gracias a una apelación presentada ante un Tribunal que se consideraron los fallos de tres jueces para tomar esta decisión; dos de ellos, confirmaron que Marín podría ser considerado un preso peligroso y con riesgo de fuga, por lo que se hizo un cambio en sus medidas cautelares.
"Acabamos de ganar una apelación ante el juzgado para que el exgobernador que me mandó torturar, Mario Marín, sea devuelto al penal de alta seguridad del Altiplano.
"Dos de los tres jueces aseguraron que Mario Marín es un preso peligroso y que debe estar en un penal de alta seguridad. Debemos recordar que antes, en la cárcel de Cancún, creó una red de corrupción al interior y por eso tuvieron que llevárselo a un penal de alta seguridad. Imaginen lo que está haciendo hoy en su casa en Puebla con los vínculos políticos que tiene. Así que hemos ganado y vamos a seguir dando la batalla 20 años después", dijo Cacho en un video.
Hay que recordar que fue en agosto de 2024 cuando el Gober precioso llegó a su vivienda particular en la capital poblana para mantenerse bajo arresto domiciliario.
En aquel lugar, el exfuncionario se mantenía con brazalete electrónico y supervisión directa desde agosto de 2024; sin embargo, la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión (FEADLE) impugnó la decisión por considerar que no se ajustaba a derecho.
Acusado por tortura
En 2005, la periodista Lydia Cacho publicó el libro Los demonios del Edén, en el que exhibió una red de corrupción y trata de personas en Quintana Roo, en donde se señaló como posible partícipe a Kamel Nacif Borge, conocido como El rey de la mezclilla.
Ese mismo año, en Puebla, fue detenida en cumplimiento de una orden de aprehensión, por su presunta participación en los delitos de calumnia. Eventualmente fue difundida la grabación en la que se evidenció la complicidad entre ambos personajes.
En 2016, la periodista denunció el acto de tortura en su contra, pero la ONU tomó conocimiento del caso hasta 2018.
Mario Marín fue capturado el 3 de febrero de 2021 en Guerrero, luego trasladado hasta Quintana Roo y el 27 de enero de 2023 fue recluido en la prisión del Altiplano.
En esa tesitura, el 14 de agosto de 2024 una jueza federal decidió cambiar la medida cautelar y, en lugar de mantenerlo en internamiento en Almoloya de Juárez, consideró que era posible continuar con su proceso judicial desde su casa.