Ciudad de México.- En el próximo Gran Premio de Austin no solo se correrá por puntos, sino por el futuro de Checo Pérez en Red Bull. Después de meses de estar bajo presión constante por sus inconsistentes resultados, la reciente decisión de Red Bull de dejar ir a Daniel Ricciardo y dar paso a Liam Lawson ha encendido aún más los focos sobre el piloto mexicano.
La salida de Daniel Ricciardo de Red Bull no fue una sorpresa total para la comunidad de Fórmula 1, pero sí marcó un punto de inflexión en la estrategia del equipo. Ricciardo había llegado como un "salvavidas" temporal, con la esperanza de aprovechar su experiencia y volver a demostrar su valía en la parrilla. Pero después del Gran Premio de Singapur, Red Bull decidió que era hora de seguir adelante.
"Daniel Ricciardo recibió una segunda oportunidad que nadie más le habría dado. Y eso se hizo con la suposición de que, con un buen rendimiento, un regreso a Red Bull era posible", explicó Helmut Marko en su columna de Speedweek. Pero los resultados no llegaron como se esperaba. "RB siempre fue un puente temporal. Pero los rendimientos necesarios solo se dieron dos veces: con un cuarto lugar en la carrera al sprint en Miami y en México el año pasado", añadió Marko, dejando claro que Ricciardo no alcanzó la velocidad y consistencia esperadas.
Con la llegada de Lawson al equipo, el mensaje de Red Bull es claro: están buscando nuevas alternativas y Pérez está en la mira. Aunque el mexicano ha resistido la tormenta de críticas y resultados mixtos durante las últimas dos temporadas, el hecho de que Red Bull haya optado por darle una oportunidad a Lawson sugiere que el tiempo de Checo en el equipo podría estar contándose.
El propio Marko dejó entrever que el asiento de Pérez ha sido un tema de discusión interna. El hecho de que Ricciardo estuviera destinado a correr junto a Max en lugar de Pérez lo dice todo. Red Bull está buscando la combinación ideal para mantener a su equipo en lo más alto, y eso incluye tener a un piloto que pueda estar a la altura de la impresionante actuación de Verstappen.
El Gran Premio de Austin será crucial para Pérez.
Sus resultados hasta ahora han sido irregulares y, aunque ha conseguido sobrevivir las críticas y rumores, Red Bull parece estar perdiendo la paciencia. Ricciardo fue traído como reemplazo de Nyck de Vries a mitad de 2023 para agregar presión, pero no lo consiguió, otorgándole a Pérez una prórroga. Ahora, Lawson toma el relevo y el panorama para Pérez no luce sencillo.