Jalisco.- El Rancho Izaguirre, ubicado en la comunidad La Estanzuela, en Teuchitlán, Jalisco, era utilizado por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) para adiestrar a jóvenes reclutados bajo falsas promesas de empleo. En el lugar, las autoridades encontraron más de 200 pares de zapatos, mochilas, ropa, altares a la Santa Muerte y áreas de entrenamiento táctico y acondicionamiento físico. Además, se hallaron seis lotes óseos en diferentes zonas del predio.
El Fiscal estatal, Salvador González, supervisó personalmente las labores en el rancho, el cual ya había sido intervenido previamente en septiembre, aunque no de manera exhaustiva. Un sobreviviente del centro de adiestramiento relató que fue retenido contra su voluntad en el lugar, donde vivió bajo condiciones extremas, presenció muertes y sufrió castigos físicos.
Los jóvenes eran sometidos a pruebas de iniciación en el rancho, y aquellos que sobrevivían eran enviados a otras plazas del CJNG. Se confirmaron la existencia de hornos crematorios clandestinos, utilizados para “procesar” los cuerpos de los jóvenes muertos debido al agotamiento, hambre, castigos y otras condiciones extremas.
La Presidenta Claudia Sheinbaum anunció que solicitó a la Fiscalía General de la República (FGR) atraer el caso del narcocampamento para una investigación más profunda, reconociendo la gravedad de los hechos y la necesidad de esclarecer lo sucedido.