La Caldera
Por: Redacción Estatal
* TRES MESES EN EL CARGO
POR AHORA está a nivel de rumor, pero muy serio si el término existiera, sobre la salida del gabinete estatal del Fiscal General del Estado, Roberto Javier Fierro Duarte.
No se conoce de fondo cuáles son o serían las causas, por ahora se habla del comentario incorrecto del Fiscal Zona Norte, Jesús Manuel Carrasco Chacón, en el sentido de que Ciudad Juárez, es una fábrica de sicarios.
Demasiado ligero el comentario del fiscal de la zona, tan despectivo se escuchó como si Ciudad Juárez no fuera Chihuahua. En todo caso dice la clase política, debió haber dicho “Chihuahua es una fábrica de sicarios”.
Los primeros reclamos correspondieron al alcalde de la frontera, el morenista Cruz Pérez Cuéllar, quien alzó la voz hasta Palacio de Gobierno para expresar su palabra favorita “no se vale”.
Desde luego el comentario con razón o sin ella, del Fiscal de la Zona Norte, si se lo guarda para él o sus jefes, nada hubiera pasado, salvó que busque con el dicho, justificar el baño de sangre que se registra en aquella frontera, no es nuevo, pero sí permanente.
Se pensaría que un comentario de esta naturaleza no le puede pegar al Fiscal General, que en todo caso el que debería de retirarse es Carrasco Chacón, suena lógico pero desde el Palacio de cantera, el jefe de gabinete Luis Serrato Martell puede tener otra opinión.
Por otra parte, el mes de noviembre cerró como el más violento del año en materia de delitos de alto impacto y robo de vehículos.
Son 114 asesinatos los que ya le corresponden al Fiscal Fierro Duarte, bajo la consideración de que a partir septiembre apenas le dio para acomodarse.
El rumor va creciendo, pese a que se trata de una persona muy cercana a la gobernadora, pero bien sabe que Maru Campos es de compromisos sólidos; la paz de los chihuahuenses es uno de de ellos.
Pero se sabe además que los resultados positivos deben llegar de manera inmediata, la sociedad chihuahuense ya no puede esperar más, menos en el tema de la seguridad y/o violencia.
* INCONSCIENCIA EN VIALIDAD
AHORA QUE desde el gobierno de Javier Corral no se emiten placas metálicas para vehículos para personas con alguna discapacidad, todo mundo utiliza los cajones azules, en perjuicio de quien realmente los necesita.
Un abuso, exceso e inconsciencia social, unida a un descontrol de la autoridad estatal, que permite que se afecte a este grupo vulnerable.
Resulta que la Dirección de Vialidad, sólo entrega cuando se demuestra la incapacidad, una credencial similar a la licencia, la que se coloca en el tablero o en el espejo retrovisor.
Por lo tanto, la credencial se “presta” a cualquier personal y se hace lo mismo sobre el mismo vehículo e inclusive en otros.
Para los agentes de Vialidad resulta muy complicado saber si se trata vehículo autorizado e imposible de saber, si el discapacitado es el conductor acreditado u otra persona.
Por desgracia, son varias personas con discapacidad quienes “prestan” la acreditación, sin pensar en el daño que se ocasiona a sus propios pares.
* EN LO OSCURITO SE SIRVIÓ CORRAL
NO HAY DUDA que el exgobernador Javier Corral Jurado, se despachó con la cucharota con la que se prepara el mole, en eso de pedir lana y gastarse participaciones federales, dinero de fideicomisos, hasta las aportaciones que hicieron los chihuahuenses aportar cada a año a las universidades y bueno hasta las cepos y alcancías de la Cruz Roja.
Corral anda muy campante ahora jugando golf en Guadalajara, mientras que en Chihuahua la gobernadora Campos Galván reveló que durante el quinquenio del corralato, se gastó hasta el “chivo” de su esposa.
Resulta que el pillín solicitó 30 créditos a corto plazo, sin decirle a nadie, menos a los chihuahuenses, como tampoco el destino de los dineros.
Esa no es la mala, el pseudo abanderado de la transparencia, los contrató con intereses del seis por ciento, lo que cae en el sospechosismo, cuando la tasa se ubica entre el 1.5 y tres por ciento.
Por qué la opacidad y la sobretasa?, no lo sabemos, ese ya es un tema de la Secretaría de Hacienda y Fiscalía General del Estado.
No se sabe si los acuerdos (oscuros) fueron con los despachos que gestionaron los créditos, o si el sobre pago fue arreglo con uno o varios bancos.
Sabrá Dios, lo real es que estos manejos que apuntan a la corrupción, costaron a las familias de esta entidad más de 600 millones de pesos en intereses.
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