Asesina a su esposa antes del divorcio

2024-04-23 21:07:13   780 Visitas


Estados Unidos.- Un hombre identificado como David Lechner, de 47 años, asesinó a su esposa un día antes de que finalizaran su divorcio provocando que ahora este siendo sentenciado a cadena perpetua sin libertad condicional. 



De acuerdo con DailyMail.com, la mujer se llamaba Tracy, tenía 42 años y era originaria de Estados Unidos. Al parecer fue asesinada en su casa del condado de Arapahoe porque su cuerpo fue encontrado en el garaje.

Las autoridades del país extranjero concluyeron en que el hombre es el principal sospechosos de la muerte de Tracy debido a que existe un testigo que lo vio dispararle a su esposa. 

El testigo tomó su camioneta y con el objetivo de impedir que  David huyera del lugar embistió en contra de su vehículo. Cuando las autoridades llegaron, el hombre aseguró que sus acciones fueron en defensa propia. 

Según sus palabras estaba intentando convencer a su esposa de que no se divorciaran. No obstante, fiscales encontraron pruebas que apuntan a que el hombre hizo un complot para causar la muerte de su esposa. 


"El asesinato de Tracy Lechner no ocurrió por casualidad (...) Esta acusada no solo se encontró en la entrada de su casa... No solo le puso tres balas en el cuerpo... Fue un asesinato deliberado", dijo un fiscal, citado por DailyMail.com. 

Las autoridades revelaron que un día antes al asesinato de Tracy, su esposo había comprado un auto de escape con un nombre falso, también adquirió una unidad de rastreo GPS, cinta adhesiva, guantes y una lona que iba a usar en un intento de secuestro.

Agregó que el hombre, durante la mañana de su ataque, estaba armado con una pistola. Todo ello fueron pruebas suficientes de su ataque. 

Cabe destacar que David fue detenido en junio de 2023, posteriormente, en diciembre del mismo año, se declaró inocente y un juez le dio una fianza de 100 millones de dólares.

Ahora, Lechner fue declarado culpable de asesinato en primer grado, intento de secuestro y uso ilegal de una pistola paralizante.




Edición: Gilberto Macías