Resolución de conflictos

2024-02-24 19:28:00   1424 Visitas


.El conflicto es inevitable. Sucederá siempre en equipos de trabajo entre personas con diferentes expectativas. Esto hace que la gestión de conflictos sea algo clave, ya sea evitando argumentos, disputas, conflictos duraderos o, en última instancia, litigios. Los conflictos pueden evitarse si se toman medidas a tiempo en una discusión para diluir el enojo y facilitar la comunicación, y se pueden resolver aplicando una serie de estrategias que utilizan los mediadores.




A continuación, explicamos algunas herramientas clave para evitar y resolver disputas en las primeras etapas, antes de que se conviertan en conflictos complejos.

1. Mantener la calma

El conflicto surge de la escalada de la ira que perturba a las personas, lo que dificulta la comprensión mutua. Es crucial mantener la calma y adoptar una perspectiva amplia y a largo plazo. Aunque los conflictos son inevitables, suelen resolverse con el tiempo. Por lo tanto, es sabio abordar los problemas de inmediato en lugar de dejar que se intensifiquen.

2. Escuchar para entender

En los conflictos, a menudo utilizamos la escucha para rebatir argumentos en lugar de comprender. Es fundamental escuchar activamente y tratar de entender la perspectiva del otro para resolver problemas. Cuando alguien está enojado, escucharlo hasta que se calme puede ayudar a disminuir su ira. La escucha activa implica mostrar signos físicos y verbales de comprensión.


3. Atacar el problema y no a la persona

Es crucial despersonalizar nuestros comentarios y centrarnos en el problema en lugar de acusar a las personas. En vez de decir "siempre estropeas las cosas", es más constructivo decir "vamos a analizar por qué sigue sucediendo". Es esencial reconocer que en la mayoría de las declaraciones durante una disputa estamos lidiando con nuestra propia ira.

4. Evitar el juego de la culpa

Al resolver un conflicto, culpar solo es efectivo si reconocemos nuestra propia responsabilidad en algún aspecto. En general, determinar quién es culpable no contribuye a la solución del problema. Culpar a alguien puede hacer que se sienta atacado y se aleje de la conversación. El enfoque para resolver conflictos radica en abordar la solución del problema en lugar de señalar con el dedo a alguien.




5. Centrarse en el futuro, no en el pasado

En el presente y en el futuro es donde está la solución. En lugar de centrarnos en lo que salió mal o en quién debería haber hecho algo, el secreto radica en buscar lo que se puede hacer para resolver el problema.

6. Ser creativo

Es importante recordar que todo es negociable y que cualquier idea puede ser buena a la hora de intentar resolver un conflicto. Mantener una perspectiva win-win y una actitud proactiva y colaborativa ayudará a encontrar una solución rápida y satisfactoria para todas las partes implicadas.


7. Hacer el tipo correcto de pregunta

Preguntas como “¿por qué?” o “¿qué creías que sería?” denotan que estamos hablando a la defensiva y en modo interrogatorio. Si queremos que alguien responda con información real, en lugar de simplemente discutir, es mejor que aportemos un poco de información primero. El otro tipo de pregunta que es esperas de…

8. Celebrar el acuerdo

A veces la gestión de los conflictos se puede convertir en un proceso largo y duro. Requiere que dos personas permanezcan en una posición incómoda, potencialmente conflictiva durante mucho tiempo, para reconstruir la confianza y ser creativos mientras tratan de encontrar la mejor solución en lugar de la más rápida. Una vez que se ha logrado, es bueno felicitarse mutuamente y celebrar de alguna manera el éxito en la resolución del problema.


Fuente: Gestión de las relaciones

Edición: Daniel Samaniego