La Caldera
Editorial de la Redacción Estatal
* QUIERE OTRA PRESIDENCIA
PRÁCTICAMENTE la diputada presidenta del Congreso del Estado, Georgina Bujanda, se ha bajado de la lista de hombres y mujeres que buscan la dirigencia del PAN municipal en Chihuahua.
Bujanda quien concluye su período en la presidencia el próximo mes de septiembre, tiene sus objetivos y metas muy claras, apuntan a la Presidencia, pero no a la del PAN.
Va por la Presidencia Municipal de Chihuahua dentro de dos años.
El pero es que, se interpondría en el gran proyecto del alcalde Marco Bonilla Mendoza, quien innegablemente buscará la reelección.
Muy temprano dirían algunos, pero en política, nuca es tarde ni temprano, sólo se es o no.
Marco Bonilla mantiene un muy buen perfil de trabajo y resultados, pero su relación con Palacio ya no es tan sólida, por lo menos no como hace un par de años, cuando se definió la candidatura a la alcaldía.
Con Bujanda, la relación se presenta a la inversa; todo indica que va en crecimiento hacia Maru y como decíamos, el tiempo se va de volada.
El dicho de que cada quien es arquitecto de su propio destino, resulta cierto, pero en la grilla y menos en estos niveles, no es suficiente.
Las cosas apuntan a complejizarse para el joven alcalde, varios buscarán la joya de la corona, una joya que para el PAN, es muy fácil de conseguir.
Seguramente en eso también piensa el diputado Mario Vázquez Robles, quien dirige la bancada de mayoría en el PAN en el Congreso local.
Está más que apuntadísimo para la alcaldía de Chihuahua, sin importarle tampoco la teorizada reelección de Bonilla.
Sabe que cuenta con la confianza y apoyo de la gobernadora, pero hay detallines incómodos por ahí.
Hay que recordar la denuncia pública de la exsecretaria de Desarrollo Rural, Lilia Merodio, quien se fue por no autorizarle varias decenas de millones de pesos para una organización campesina donde está vinculado y su oposición a la reforma en la UACh, son sólo ejemplos.
* PRIMER VICTIMA
LUEGO del enojo social por las condiciones de abandono extremo de la Ciudad Deportiva, el gran pulmón de la capital, por parte del gobierno estatal anterior y el actual, se despidió a quien realmente estaba preocupado por este enorme espacio.
Se trata de Enrique Prieto, quien durante de 26 años se desempeñó como “encargado de la Ciudad Deportiva”.
No se conocen razones o justificación para que desde el Instituto Chihuahuense del Deporte, le hayan dado las gracias.
El descuido de las instalaciones deportivas, incluyendo las canchas; el mobiliario en deplorables condiciones, la falta de alumbrado público y la basura distribuida por toneladas, no es responsabilidad de Prieto.
Se trata entonces de la falta de presupuesto y de personal, lo que corresponde al Gobierno del Estado, no al trabajador que durante el quinquenio pasado y lo que va del presente sexenio, ha hecho lo humanamente posible.
Incluso, hay quienes afirman que aparte de “pagar los platos rotos”, por el descuido, en el fondo está la relación política que mantiene con alguien muy importante el PRI.
*LISTO PARA LA GRILLA
EL QUE anda totalmente recuperado de salud y en la talacha política, es Servando Portillo, el exsecretario particular de exgobernador César Duarte Jáquez.
Portillo se cayó de su caballo en el 2015, cuando estaba de paseo con su familia en su rancho en el vecino Municipio de Aldama, en donde ocurrió el accidente.
El exfuncionario se golpeó fuertemente la cabeza y otras partes del cuerpo, lo que lo llevaron casi a una vida vegetal, postrado en una silla de ruedas y en desahucio de la ciencia, pero afortunadamente su recuperación ha sido positiva.
Servando está de regreso y con recuperación casi al 100 por ciento; en lo suyo, la grilla.
Por: Reporteros Radiza Chihuahua